Cómo aprovechar las oportunidades que ofrece la digitalización de los sistemas HVAC-R

Cómo aprovechar las oportunidades que ofrece la digitalización de los sistemas HVAC-R

¿Sabemos cómo aprovechar las oportunidades que ofrece la digitalización de los sistemas HVAC/R? En este artículo, la autora  explica las posibilidades y ventajas de esta proceso para el sector de la climatización, tanto para los técnicos como para los propietarios de los sistemas.

 

 Serena Ometto, Sales and Marketing Manager – Services en Carel

 

 

En 2010, Eric Schmidt, en aquella fecha CEO de Google, dijo que se habían creado 5 exabytes de información desde el comienzo de la civilización hasta el año 2003. Hoy en día, esta misma cantidad de datos se genera cada dos días. Esta tendencia también se confirma en el sector HVAC/R, particularmente en la digitalización de sistemas. El desafío de la máquina conectada se ha superado, pero ahora surge una nueva pregunta: ¿qué hacemos con todos estos datos? El verdadero problema es que solo podemos procesar unos pocos estímulos simultáneamente. Por lo tanto, si nos fascinan los detalles de los gráficos y los informes, perdemos fragmentos de contexto y su uso real. Por el contrario, cuanta menos información tengamos que procesar, más profundamente estaremos dispuestos a analizarla. Por tanto, centrar nuestra atención significa elegir en qué información invertimos nuestro tiempo para conseguir los objetivos de nuestro trabajo.

 

Una vez definido el alcance del uso de datos, también es necesario evaluar la experiencia del usuario. Es importante considerar que las personas siempre buscan la forma más fácil de hacer las cosas: el camino del deseo. Este concepto se basa en el principio del mínimo esfuerzo, tanto cognitivo como físico, que lleva a las personas a elegir siempre el camino de menor resistencia. La digitalización de los sistemas puede ser un medio para garantizar una experiencia de cliente sencilla y satisfactoria para el usuario. El cliente no sólo será fidelizado, sino que tenderá a hablar bien del propio producto, convirtiéndose en su promotor.

 

 

En función de las necesidades del cliente, la digitalización ofrece la posibilidad de agilizar las operaciones del día a día:

 

  • Para los técnicos de servicio, en un momento en que la tecnología HVAC/R evoluciona a una velocidad cada vez mayor y presenta nuevos equipos y nueva experiencia para administrarlos adecuadamente, la tecnología digital respalda las actividades de instalación, mantenimiento y reparación con interfaces de aplicaciones, diagnósticos automáticos y planificación de servicios optimizados.

 

  • Para los propietarios del sistema, el aumento de los costes de energía y la legislación reciente para reducir el impacto energético de los edificios representan un nuevo desafío para optimizar el consumo. Para lograr estos objetivos, la digitalización es esencial para realizar un seguimiento de la base instalada, verificar el rendimiento y extender las mejores prácticas.

 

Nuevos modelos de negocio

Para mantener el foco en el cliente y sus necesidades, cada vez son más las empresas que evolucionan, creando nuevos roles como el Chief Customer Officer, responsable de la satisfacción y fidelización de los clientes. Su papel es liderar la evolución de los servicios complementarios para fidelizar a los clientes, generando nuevas oportunidades de negocio relacionadas con estos servicios. Mediante el uso de las mejores tecnologías, pueden habilitar servicios dedicados para administrar los sistemas a lo largo del ciclo de vida con suscripciones periódicas que garantizan el rendimiento de la máquina, una intervención rápida y repuestos específicos: todo incluido en una tarifa periódica. Este ambicioso objetivo impulsa a la compañía hacia nuevos modelos de negocio como el “pago por uso”. En el campo HVAC/R, esto significaría pagar la refrigeración, la calefacción o la humedad como un servicio y no a través de los bienes que lo generan.

 

 

Esta evolución se encuentra en sus primeras etapas. Es común que las empresas tengan un paquete de servicios “básico, determinado únicamente por los requisitos del cliente como, por ejemplo, la monitorización de unidades y repuestos. A las empresas a menudo les resulta difícil desarrollar servicios más avanzados y complejos. Los servicios “intermedios”, como por ejemplo la formación y la consultoría, solo se utilizan para estimular la demanda de servicios “básicos”, en lugar de servir como impulsores de ofertas de servicios avanzados. En la mayoría de los casos no se incluye, por tanto, la mejora continua de la oferta de servicios, aunque es fundamental para incrementar las ventas de los productos.

 

Este hecho fue confirmado en una encuesta realizada en 2022 por ASAP (Centro de Investigación de la Universidad Italiana) entre 250 respuestas de empresas europeas. Aunque alrededor del 80% de las empresas fabricantes ya han hecho de los servicios una línea de negocio, es evidente que los servicios transaccionales son los más demandados (como formación y consultoría, reparaciones y repuestos), seguidos de los servicios plurianuales (contratos): más del 70% de las empresas ya los incluyen en su cartera. Los servicios basados en el uso (renting, leasing, pooling y sharing) todavía son relativamente limitados en su adopción.

 

Las tecnologías digitales del Internet de las Cosas (IIoT, Internet Industrial de las Cosas), cloud computing, inteligencia artificial, machine learning y realidad mixta son adoptadas y establecidas por más del 60% de las empresas. Sin embargo, la mayoría informa que, incluso hoy en día, las empresas a menudo no siguen una estrategia real, sino que responden a fuerzas externas (mercado, competidores, clientes).

 

Así, en ausencia de una verdadera estrategia de servicios digitales, las empresas no hacen un uso adecuado de estos datos para diseñar y entregar servicios que puedan generar valor añadido para el cliente.

 

La búsqueda permanente de soluciones sostenibles para garantizar un mundo mejor para las nuevas generaciones impulsa la servitización como modelo de negocio para garantizar un uso eficiente y seguro de la energía. Sin embargo, las estadísticas actuales parecen confirmar que la transición a un modelo de servitización digital sigue siendo complicada y difícil para muchos. Solo a través de una colaboración muy estrecha entre el cliente y el fabricante, así como con todas las partes interesadas involucradas en el ecosistema, será posible desarrollar estrategias dedicadas para lograr estos objetivos.