Concluye la rehabilitación energética del Teatro Real con la inauguración de su cubierta solar

Concluye la rehabilitación energética del Teatro Real con la inauguración de su cubierta solar

La vicepresidenta y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Sara Aagesen, inauguró el pasado viernes la nueva cubierta solar del Teatro Real, que cuenta con 2.198 placas solares que generarán 190 MWh al año de energía solar, con la que concluye la rehabilitación energética del teatro, que lo ha convertido en una edificación con un consumo energético prácticamente nulo (NZBE, Nearly Zero Energy Building).

 

Acompañada por el ministro de Cultura, Ernest Urtasun; el presidente del Teatro Real, Gregorio Marañón; y su director general, Ignacio García-Belenguer; la vicepresidenta conoció el detalle de las otras actuaciones para incrementar la eficiencia energética en este emblemático edificio, que supondrán un ahorro de energía de 1,5 GWh/año, el equivalente a dejar de emitir 263 toneladas de CO2 a la atmósfera.

 

“Es un proyecto transformador, en el Teatro Real, que es un edificio dinámico, activo, vivo, un lugar de encuentro donde la cultura es protagonista y que es un símbolo de identidad. Creo que es fantástico que este proyecto de vanguardia sea aquí, porque mucha gente pasa por el Teatro Real todos los días y van a poder disfrutar de esta gran transformación y van a poder ver no solo que es posible, si no que tiene muchísimos beneficios”, defendió la vicepresidenta Aagesen.

 

Edificio sin emisiones

 

La rehabilitación energética del Teatro Real, que ha estado coordinada por el Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE), busca transformar una construcción de 1850 en un edificio casi cero emisiones, sin que ello afecte ni a su integridad ni a sus valores arquitectónicos e históricos.

 

En conjunto, las mejoras de eficiencia llevadas a cabo, financiadas íntegramente con 5,3 millones de euros procedentes del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR), han permitido al Teatro Real dar un salto de tres letras en su certificación energética, pasando de una calificación D a una A. “Un logro técnico con un valor simbólico único que pone de manifiesto que es posible conciliar la preservación de nuestro patrimonio histórico con las necesidades de un mundo que avanza hacia la descarbonización, las energías renovables y la eficiencia energética”, señaló  Aagesen.

 

Además de la instalación de placas fotovoltaicas en la cubierta, este proyecto aúna diversas actuaciones, como la sustitución de grupos de frío, bombas de calor y motobombas, la optimización de los sistemas de climatización y la calidad del aire o la sustitución de luminarias obsoletas por iluminación LED en la Sala Gayarre, diseñadas de forma integrada para hacer del teatro un edificio autosuficiente en términos energéticos.

 

El Teatro Real se ha convertido, además, en el primer y único bien de interés cultural en acreditar sus ahorros energéticos, siendo la primera actuación singular de eficiencia energética en solicitar un Certificado de Ahorro Energético (CAE) en España.

 

La modernización energética del Teatro Real forma parte del Plan de transición energética en la Administración General del Estado, enmarcada en la política palanca cuarta del PRTR, “Una Administración para el siglo XXI”, que define todo un programa de actuaciones para la transición energética de la AGE.