Los cogeneradores reclaman un marco de futuro integral de cogeneracion y CO2 para la industria en España

Los cogeneradores reclaman un marco de futuro integral de cogeneracion y CO2 para la industria en España

Con idea de mostrar la radiografía del sector de la cogeneración española, que vive un momento clave a la espera de la convocatoria de subastas, Acogen presenta su encuesta 2021 ‘Hablan los cogeneradores’, que refleja la opinión de las principales empresas de todos los sectores industriales que cogeneran. Entre las reivindicaciones, los cogeneradores reclaman un marco de futuro integral de cogeneración y CO2 para la industria en nuestro país.

 

 

En la encuesta ‘Hablan los cogeneradores’ , elaborada por la Asociación Española de Cogeneración (Acogen), han colaborado las principales empresas que cogeneran en todos los sectores industriales (alimentación y bebidas, química, celulosa y papel, automóvil, cerámica y azulejos, ladrillos y tejas, residuos, agrícola…). Estas empresas representan el 75% de la potencia instalada en España, que supone el 15% del PIB industrial. Las conclusiones más importantes que ha arrojado el estudio son los siguientes:

 

Perfil del cogenerador español 2021

El perfil del cogenerador español de 2021 es una industria calorintensiva —80% consume el doble de calor que de electricidad—, funcionando en continuo 24/7, y con la cogeneración como tecnología de referencia para transformar gas en el calor y la electricidad que necesita para su proceso productivo. Sus costes energéticos, de CO2 y gestión ambiental suponen entre el 15% y 20% -más que de mano de obra- de los de fabricación, un porcentaje determinante de su competitividad.

El cogenerador tipo mantiene una actividad fuertemente exportadora: el 51% exporta más del 30% de lo que produce y el 38% más del 50%.

 

 

El 51% de los cogeneradores españoles está integrado en multinacionales. Y, curiosamente, la cogeneración a gas es también la tecnología de referencia para el 80% de sus competidores directos, sobre todo de otros países europeos.

El 90% considera inviable electrificar el calor de los procesos de fabricación.

 

Situación: al límite sin marco de cogeneración futuro

Los cogeneradores españoles de 2021 atraviesan una situación límite. Realizan su actividad sin un marco de cogeneración de futuro, inmersos en plena crisis post-COVID y con los costes energéticos y ambientales en feroz escalada; perspectivas muy preocupantes a corto y medio plazo.

El 80% de sus competidores directos —fundamentalmente europeos— utilizan cogeneración a gas y otras tecnologías de economía circular (biomasa, biogás, valorización de residuos…) que también emplean las industrias españolas, que señalan como principal desventaja que no cuentan en nuestro país con marcos de cogeneración a futuro.

Los cogeneradores -78%- constatan que las inversiones de las multinacionales en sus industrias en España —la mitad se integra en este tipo de grupos— se retrasan por la incertidumbre y la falta de apoyo a la cogeneración en nuestro país y por la expectativa de que nuestros costes energéticos continúan en franca escalada. Sólo el 18% de estas multinacionales señala el marco laboral y 25% el marco fiscal como causas determinantes del retraso de sus inversiones en España.

 

 

Los cogeneradores alertan de las graves consecuencias del fin de vida útil de sus plantas en los próximos 3 años que afectará a cientos de industrias, afirmando que si no se toman medidas generará gravísimas consecuencias para las industrias calorintensivas: 82% señala pérdida de competitividad de las fábricas, 57% destacan imposibilidad de trasladar las pérdidas al precio del producto y la mayoría califican la situación de frustración industrial al no haber alternativa mejor a la cogeneración.

Los cogeneradores consideran urgente y necesario un marco de futuro para la cogeneración en España a semejanza de otros países europeos que promueven y emplean también cogeneración.

 

Contexto económico, tecnológico y normativo

Los cogeneradores, en un contexto de crisis económica post-COVID, se muestran seriamente preocupados por mantener la competitividad y el empleo en sus industrias y están analizando y han evaluado las posibles alternativas económicas, tecnológicas y ecológicas.

 

 

Esperan la anunciada convocatoria de subastas de cogeneración por el Ministerio y señalan imprescindible que se actualice el precio de CO2, que les reconocen actualmente en 24 €/Ton CO2 cuando los precios ya han rebasado los 50 €/Ton CO2.

Los planes de hibridación de la cogeneración con otras tecnologías renovables están muy avanzados en sus industrias: 70% de los cogeneradores han evaluado instalar fotovoltaica en sus cubiertas; 48% estudian implementar más biomasa; 41% evalúa valorizar residuos energéticamente y el 26% recurriría al biogás y otros gases renovables.

Sin embargo y pese a evaluar la implementación de todas estas posibles alternativas, los cogeneradores afirman que la efectividad de las nuevas tecnologías es muy limitada para lograr el autoabastecimiento continuo de sus industrias calorintensivas: el 50% afirman que solo es posible reemplazar en sus industrias hasta un 30% de los combustibles y demandas eléctricas.

La falta de rentabilidad económica, periodos de retorno demasiado largos y la volatilidad e incertidumbre del momento, hacen que los cogeneradores frenen por el momento sus inversiones e hibridaciones en renovables que planifican masivamente a 2030.

Los cogeneradores vislumbran una fuerte evolución de los costes energéticos y ambientales: ven a medio plazo el CO2 a más de 50€/Ton, subidas de más 15% en electricidad, del 6% en gas y de más del 30% en los tratamientos ambientales. Para el 61% de los cogeneradores, si no se desarrolla un marco industrial integral de cogeneración y también CO2, vertidos, impuestos y tasas, se pondrá en claro riesgo la competitividad de las industrias.

El 90% de los cogeneradores ven inviable electrificar el calor de sus procesos de fabricación continua, y, por ello, cuentan unánimemente con sus cogeneraciones para producirlo junto con otras tecnologías renovables, señalando que es la mejor solución y más competitiva para avanzar en la descarbonización industrial.

El 92% de los cogeneradores españoles afirman imprescindible contar a 2030 con sus cogeneraciones de igual o menor potencia, empleando gas natural y otros gases renovables. Además, el 51% prevén instalar fotovoltaica, uno de cada tres valorización de residuos para generar calor, y uno de cada cinco producir hidrógeno para consumo propio o inyección a la red. El 17% producirá biogás para autoconsumirlo en cogeneración.

Los cogeneradores confirman esta tecnología como una parte esencial del presente y del futuro energético de las industrias calorintensivas en España y del reto de la descarbonización industrial.

 

Sus tres imprescindibles camino a 2030 y a la descarbonización

La encuesta Acogen 2021 concluye que los cogeneradores consideran que la producción industrial calorintensiva corre grave riesgo de deslocalización sin una transición energética competitiva y acorde frente a otros países europeos y establece una serie de imprescindibles en el camino a 2030 y a la descarbonización:

 

  1. Imprescindible definir un marco integral industrial de cogeneración y CO2, costes de gestión ambiental, impuestos y tasas, en línea con los de los países industrializados europeos.

 

  1. Imprescindible adaptar los tiempos del PNIEC 2021-2030 a la realidad actual post-COVID y reclaman apoyo, diálogo y confianza de la Administración para una mejor comprensión de la realidad energética y medioambiental de la industria.

 

  1. Imprescindible plazos de inversión razonables —cinco años, mínimo— para planificar y la puesta en valor de la electricidad producida y consumida a nivel local, junto a la prioridad de acceso a la capacidad de las redes para la industria.

 

 

En este punto, los cogeneradores españoles ofrecen total colaboración y compromiso para avanzar en la descarbonización,  garantizando que ya buscan alternativas en base al uso de gases y energías renovables junto con valorización de residuos, pero que todo ello precisa de un proceso acompasado a la madurez tecnológica y al momento económico, en consonancia con sus competidores que también están convencidos de que la cogeneración es el mejor pilar de las industrias calorintensivas para una transición competitiva hacia la descarbonización.