Tecnología ‘made in Spain’ para el almacenamiento de hidrógeno a alta presión

Tecnología ‘made in Spain’ para el almacenamiento de hidrógeno a alta presión

El hidrógeno, como alternativa de energía limpia, está en todas las quinielas para un futuro descarbonizado y con vista a frenar el cambio climático. Este gas renovable presenta, no obstante,  un reto fundamental, como es su almacenamiento a altas presiones, un proceso que ya está realizando con éxito la empresa burgalesa Hiperbaric. La compañía española, referente en la fabricación de equipos industriales de tecnologías de altas presiones, acaba de suministrar los primeros compresores de hidrógeno renovable a alta presión para industria y movilidad sostenible

En el marco de la jornada “Hidrógeno como vector energético sostenible en la transición energética”,  celebrada en la sede de Hiperbaric en Burgos, que reunió a expertos de los sectores público y privado, la empresa presentó la tecnología de compresión que se realiza en su centro de producción, al tiempo que se analizaron los proyectos territoriales con hidrógeno como vector energético sostenible. Hiperbaric es la primera empresa española que desarrolla este tipo de equipos de comprensión de hidrógeno

 

Aumento de renovables en Mallorca

Una de las iniciativas en marcha es el proyecto ‘Power to Green Hydrogen Mallorca’, para el que la compañía suministrará un grupo compresor de hidrógeno a 500 bar de presión. Impulsado por Enagás y Acciona junto con Cemex, IDAE y Redexis, se trata de una iniciativa que estará operativa en breve y que contribuirá a aumentar la penetración de las energías renovables en el sistema energético balear, demostrando el acoplamiento y la integración sectorial, y avanzando hacia la descarbonización total de la economía.  “Es un hito ser la primera empresa española en ofrecer equipos seguros, eficientes y fiables para la compresión de hidrógeno», señaló Andrés Hernando, consejero delegado de Hiperbaric.  «Con el desarrollo de nuestros compresores de hidrógeno contribuiremos activamente a la transformación energética”, añadió el directivo, y subrayó la  importancia de trabajar en el proyecto con Enagás, referente internacional en innovación energética y con un firme compromiso con la sostenibilidad.

 

 

Este proyecto industrial es el núcleo del proyecto de Green Hysland, en el que la Unión Europea, a través de la FCH JU (Fuel Cell and Hydrogen Joint Undertaking), ha comprometido 10 millones de euros para apoyar el despliegue de las infraestructuras necesarias. El proyecto se enmarca en la hoja de ruta del Gobierno, que prevé llegar en 2030 a 4 gigavatios de capacidad de producción movilizando una inversión total estimada de 8.900 millones de euros.

 

Movilidad sostenible 

Otra área de aplicación de la tecnología de compresión de hidrógeno es el repostaje de vehículos de pila de combustible en estaciones de recarga o hidrogeneras. El primer compresor de Hiperbaric en este campo, y primero realizado por una empresa española, se ha entregado e instalado en el Centro Nacional del Hidrógeno (CNH2) en Puertollano, Ciudad Real, y se ha destinado a movilidad sostenible destinado para una hidrogenera portátil.

El equipo abastece hidrógeno a 900 bar de presión, lo que supone la mayor presión de almacenamiento de hidrógeno para una hidrogenera de última generación a nivel internacional. El modelo desarrollado por la multinacional española incluye el sistema de refrigeración y es capaz de comprimir hidrógeno y rellenar tanques de almacenamiento de 500 a 1000 bar.

Precisamente, durante el acto de presentación en Burgos, Hyundai presentó la tecnología de pila de combustible de hidrógeno de su vehículo Nexo. Hay que destacar que Hyundai es el primer fabricante mundial en producir vehículos de pila de combustible de hidrógeno en masa: un hecho sin precedentes en la industria del automóvil. La compañía lidera el ranking de mayor venta de vehículos de pila de combustible, y para 2023 introducirá su nueva generación de pila de hidrógeno con el sucesor del Nexo.

A nivel europeo, para 2030 está previsto alcanzar una flota de 5 millones de vehículos eléctricos de pila de combustible y 13 millones de usuarios privados o el uso de 600 kt de hidrógeno en el sector industrial.

 

Valle del Hidrógeno Renovable 

Otro de los proyectos destacados, que se desarrollan actualmente en Burgos, ciudad y provincia que destacan como núcleos clave y estratégicos en la cadena de valor del hidrógeno verde, es el Valle de Hidrógeno Renovable para Industria & Movilidad. Esta iniciativa, que Hiperbaric lidera  junto con la Fundación Caja de Burgos, la Universidad de Burgos y el Ayuntamiento, así como diferentes empresas y centros tecnológicos, plantea un conjunto de actividades orientadas hacia la descarbonización de la economía y el cumplimiento de los objetivos 2030/2050 plasmados por el Ministerio Español en la “Hoja de Ruta del Hidrógeno”.

El proyecto abarca toda la cadena de valor del hidrógeno renovable: generación a partir de energía eléctrica renovable: eólica y solar; almacenamiento a alta presión y distribución, y consumo en nuevas aplicaciones industriales y en movilidad. En cuanto a la ciudad de Burgos este proyecto incluye la implantación de una hidrogenera que servirá para abastecer una flota de autobuses urbanos impulsados por hidrógeno. Los principales objetivos son la reducción la huella de carbono de los procesos industriales asociados y la promoción de una movilidad sostenible, tanto en el ámbito urbano como en el transporte de mercancías por carretera. Para Daniel de la Rosa, alcalde de Burgos, la ciudad desarrolla un importante papel. «Esta ciudad, corazón industrial de la provincia y nudo de comunicaciones, puede jugar en el freno del cambio climático y en el camino hacia las cero emisiones en 2050”.

Por su parte,  Santiago González, responsable de la Política de Hidrógeno del IDAE, incidió en el Hidrógeno Renovable como “Proyecto de País”, articulado a través del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR) del Gobierno. Como explicó el ponentes, este Plan persigue mejorar las capacidades productivas y de transferencia tecnológica, fomentando la colaboración de Pymes globales; la creación de dos clústers de hidrógeno renovable que se localicen en polos industriales de los principales consumidores de hidrógeno o las líneas de apoyo para la participación de empresas nacionales en proyectos y consorcios europeos, entre otras.