Acuerdo para monitorizar las actuaciones de rehabilitación energética en edificios madrileños
l pasado viernes 27 de noviembre tuvo lugar la firma de un protocolo de colaboración entre el Ayuntamiento de Madrid y el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), a través del el Instituto Eduardo Torroja, para desarrollar conjuntamente un plan de monitorización que ayude a medir los principales hábitos de consumo energético en viviendas de la capital. Protagonizaron la firma del acuerdo el delegado de Desarrollo Urbano, Mariano Fuentes; el concejal delegado de Vivienda, Álvaro González, y la vicepresidenta de Organización y Relaciones Institucionales del CSIC, Rosina López-Alonso.
Se trata de un programa de monitorización que permitirá medir y cuantificar los indicadores de consumo y confort en inmuebles sometidos a rehabilitación energética, dentro del Plan Rehabilita 2020, ofreciendo beneficios en la subvención que hayan solicitado a los voluntarios que quieran participar en esta iniciativa. Cabe recordar que el Plan Rehabilita 2020 consiste en una importante línea de ayudas aprobada para emprender actuaciones de accesibilidad, regeneración, eficiencia energética y salubridad en viviendas y edificios de la capital.
Eficiencia en la gestión municipal
Para Mariano Fuentes, la firma de este protocolo de colaboración “entronca con nuestro espíritu de colaboración con otras instituciones u organismos, sean públicos o privados, pensando siempre en la máxima eficiencia de la gestión municipal y en mejorar la vida de los ciudadanos”.
Por su parte, el concejal delegado de Vivienda, Álvaro González, destacó que “todo lo que se puede medir, se puede mejorar”, subrayando que este plan de monitorización obedece al interés del Ayuntamiento a la hora de obtener “indicadores fiables y reales que permitan una mejora de la sostenibilidad y la eficiencia energética de los edificios en toda la ciudad. Su realización supondrá la obtención de una información imprescindible sobre los hábitos de consumo de los vecinos en edificios de viviendas y permitirá la elaboración de recomendaciones para promover un ahorro energético más eficaz. Igualmente, servirá para la elaboración de estadísticas divulgativas para toda la ciudadanía madrileña”. En definitiva, se trata de controlar, con datos reales, las repercusiones que tienen estas obras de rehabilitación energética en la sostenibilidad de los inmuebles.
El CSIC dispone, dentro del Instituto Eduardo Torroja, del grupo de investigación Sistemas Constructivos y Habitabilidad en Edificación, que viene desarrollando desde hace años diferentes proyectos de I+D+i relacionados con la rehabilitación de viviendas sociales en Madrid. Entre ellos se encuentra la monitorización de las condiciones ambientales interiores y de los consumos energéticos de un importante número de viviendas, de ahí que el Ayuntamiento de Madrid haya recurrido a su ayuda para la realización de estas actuaciones contenidas en este plan.
Líneas de actuación de ‘Rehabilita 2020’
Rehabilita 2020 cubre con sus subvenciones cuatro líneas concretas, centradas en elementos comunes de los edificios. La primera compete a mejoras en la accesibilidad de los inmuebles de la capital, instalando ascensores, plataformas elevadoras o rampas. La segunda se centra en conservación de fachadas, cubiertas o estructuras, generalmente obras derivadas de la Inspección Técnica de Edificios (ITE). Potencia la eficiencia energética es el objetivo de la tercera, incluyendo trabajos para aislar fachadas, sustituir calderas comunitarias o instalar cubiertas verdes y puntos de recarga de vehículos eléctricos, mientras que la cuarta línea consiste en un plan que fomenta la salubridad, con actuaciones de retirada de elementos con amianto, reduciendo la concentración de radón o mejorando la calidad del aire interior. El objetivo es ayudar a 5.000 familias y generar unos 1.700 empleos.
La finalidad del Plan Rehabilita 2020 no solo es mejorar el tejido residencial de Madrid, sino acceder con datos concretos a los beneficios que generan estas actuaciones en materia de salud, habitabilidad y eficiencia energética, además de informar a los ciudadanos sobre sus hábitos de consumo para que tengan recomendaciones eficaces de ahorro energético.
