El sector del cable regresa a la senda del crecimiento: con una recuperación del 8% en el primer trimestre
A pesar de que el sector del cable experimentó caídas del 12,4% al cierre de 2020, la Asamblea de General de FACEL, celebrada de forma telemática el pasado 21 de abril, dejó un mensaje positivo y esperanzador para este ejercicio, tras cerrar el primer trimestre con un incremento cercano al 8% en el nivel de actividad. Además, cada vez más cerca del Plan de Reactivación, Transformación y Resiliencia Económica, que focalizará un paquete muy importante de inversiones en programas vinculados con la reducción de la huella de carbono, las energías renovables, la eficiencia energética o la digitalización, las empresas de FACEL esperan un impacto importante en el sector que, según su presidente, Jordi Calvo, “debería crecer por encima de la media de nuestra economía”.
Las cifras que se ofrecieron durante la Asamblea dejan, por sectores, una contracción del 10% (+12,2% en 2019) en los cables industriales, y un -7,6% en toneladas (+7,2% en 2019). Peor resultado obtuvo los de telecomunicaciones y datos, donde las ventas se desplomaron un -17,9% (+8,5% en 2019).
Por mercados, la caída del nacional para los cables de energía se situó en el -11,4 % (tons), mientras que para los cables de telecomunicaciones y datos fue del –21,2%. Las exportaciones tampoco se salvaron del debacle, aunque las caídas fueron más leves, de un -2,8% (tons) en cables de energía y un -13,8% en los de telecomunicaciones y datos. Por el contrario, el mercado de accesorios para cables de M.T. se mantuvo en las cifras del 2019.
Periodo pre-pandemia
El primer trimestre del 2021, aunque con resultados en positivo, se caracteriza por el retroceso de los indicadores industriales y de servicios, “consolidándose un nivel de actividad sensiblemente inferior al del cuarto trimestre del 2019, del periodo pre pandémico”, confirmó el presidente de FACEl, identificando como factores determinantes: las sucesivas olas de la pandemia y las medidas de restricción adoptadas para contenerlas, la interrupción de suministros procedentes de proveedores asiáticos y el fuerte incremento de los precios de las materias primas, entre otros.
Anticipó que el cambio de tendencia sólo será posible “con la relajación de las medidas de restricción de la movilidad, la llegada de los distintos estímulos para la reactivación económica española y europea, así como el aumento del gasto público”. Un conjunto de factores que ayudaría a reactivar el consumo privado, el sector de cables en España y al sector turístico.
Otros factores que se consideran claves para la aceleración de la recuperación económica y la evolución del sector los próximos años son:
- El comportamiento del sector exterior, que dependerá de la evolución de la pandemia en los mercados de destino de estos productos. No obstante, el crecimiento que se prevé para las exportaciones en 2021 ronda el 7%, estimando llegar al nivel pre crisis sólo a partir del cuarto trimestre del 2022.
- La reactivación del sector turístico, donde se prevé que la actividad alcance el 50% de los niveles anteriores a la pandemia en el segundo semestre de este año, y acaben recuperando la normalidad en el 2023.
- La aceleración del PNIEC, uno de los pilares estratégicos del gobierno para la creación de empleo y transformación energética de nuestro país. Un proceso de cambio de paradigma del modelo energético al que este sector tiene mucho que aportar, viéndose también beneficiado de las inversiones que se realicen en los próximos años.
- La celeridad en la aprobación e implementación de las acciones previstas por el Plan Nacional para la Reactivación, Transformación y Resiliencia de la Economía Española, financiado fundamentalmente con los fondos de la Unión Europea para la reconstrucción económica (Next Generation Plan), explicando el presidente de FACEL en este apartado el papel de la Asociación en el Macro Proyecto Tractor (MPT) para la rehabilitación energética de instalaciones eléctricas en edificios, comercios e industria.
Tras relacionar las luces y las sombras a las que nos enfrentamos para afrontar el proceso de transformación y cambio de la sociedad, la economía y el modo de gestionar los recursos, Calvo mencionó la necesidad de digitalización de la economía, el cambio inminente y necesario de la regulación laboral y de la organización del trabajo como parte de “los cambios que están llegando”.
Morosidad del 5,4% en 2020
Tras citar algunas de las variables que influyen en el despegue económico, citó la problemática de la morosidad que ha alcanzado el 5,4% en 2020 respecto al 3,1% del año anterior. “La previsible eliminación gradual de los avales del gobierno a los créditos ICO puede ulteriormente perjudicar el nivel de morosidad en nuestro país”, añadiendo a este dato “la extensión de 4 días de los plazos de cobro verificado en el 2021, y la política restrictiva de las compañías de seguro de crédito”, algo que, a su juicio debe “alertar del riesgo de impagos que, la economía en general y nuestro sector en particular, tendrán que gestionar en los próximos meses. En este aspecto señalar la actuación de FACEL a través de la Plataforma Contra la Morosidad para impulsar y esperemos finalmente conseguir la aprobación por el Parlamento del Régimen Sancionador de la Ley de Plazos de Pago”.
A nivel asociativo, destacó las actuaciones de la Asociación para promover conjuntamente con otras patronales del Sector Eléctrico y con la Plataforma Contra la Morosidad, la creación de una Mesa Sectorial que impulsen acciones ante la Administración y el Sector de Seguros de Crédito, para garantizar el acceso a líneas de créditos comerciales de los clientes.
Recordó también que a pesar de que FACEL continúa impulsando la correcta aplicación del CPR, reglamento europeo que regula la reacción al fuego de los cables de uso industrial en el sector de la construcción, todavía se comercializan productos que no cumplen esos parámetros requeridos de acuerdo a la clasificación CPR.
Hay en la recta final de la Asamblea, Jordi Calvo se refirió a la “situación actual de nuestro Recurso Contencioso Administrativo contra el Expediente Sancionador de la CNMC, que con fecha 7 de febrero 2018 fue admitido a trámite por la Sala de lo Contencioso Administrativa de la Audiencia Nacional”, explicando que hasta ese momento el tribunal aún no se ha pronunciado y “continuamos a la espera de Sentencia que resuelva el recurso Contencioso Administrativo interpuesto por FACEL”.
