Los impagos comerciales crecen un 14% en el primer trimestre

Los impagos comerciales crecen un 14% en el primer trimestre

En el primer trimestre de un año que, sin duda alguna, pasará a la historia, el comportamiento del Índice Crédito y Caución de Incumplimiento ha mostrado un incremento interanual de los impagos en España de más de un 14%, con porcentajes que se dispararon en las semanas posteriores, coincidiendo con los momentos más duros de la pandemia.

Este índice de incumplimiento, elaborado por la aseguradora Crédito y Caución puntera en el mercado español, visibiliza el origen e intensidad de la evolución de los impagos que sufre el tejido empresarial en ese periodo y contexto económico concreto.

A nadie se le escapa que la evolución del indicador en los siguientes trimestres de 2020 estará muy influenciado por el impacto de la pandemia de Covid-19, con especial incidencia en los flujos de caja, las cadenas de producción y la actividad comercial y los efectos de las medidas extraordinarias de acceso a la liquidez del tejido empresarial.

Tendencia a empeorar

Manejando esos referentes, las previsiones actuales apuntan a que la insolvencia empresarial en España empeorará durante 2020, tal y como confirman ya distintas fuentes, agudizándose el deterioro de los niveles de impago en el crédito comercial, en frecuencia e intensidad, por las tensiones de tesorería del tejido productivo. En este contexto inédito, el seguro de crédito está respondiendo con proporcionalidad al cambio de escenario económico, aportando elementos de protección del crédito comercial a clientes a sus asegurados.

Comparativamente, hay que remontarse a 2008 para detectar comportamiento similares de incumplimiento desde que comenzaron a elaborarse los registros. Fue en ese período cuando los niveles de impago soportados por el tejido empresarial se multiplicaron por tres. Posteriormente, el índice ha mostrado en la última década un comportamiento de dientes de sierra fruto de diversos factores, como la evolución del entorno de negocio, el acceso a la financiación bancaria y la prudencia en la gestión del crédito al cliente en el B2B.

Así, tras la mejoría encadenada de los niveles de impago en 2009 y 2010, fruto en gran medida a la mejora general en la selección del riesgo, el empeoramiento alcanzó una nueva fase en 2011 y 2012, que se logró remontar y mejora entre 2013 y 2015, un periodo muy vinculado a un intenso incremento de la actividad comercial, según las fuentes consultadas. A partir del segundo trimestre de 2016, los niveles medios de impago soportados por la empresa española mostraron un cambio de signo hacia el suave empeoramiento que ha sido la tónica de los últimos años.