Petición para revisar la exclusión de los instaladores de las ayudas del Gobierno
La Asociación Profesional de Empresarios de Instalaciones Eléctricas y de Telecomunicaciones de Madrid, APIEM, se ha unido, a través de AECIM, a la petición lanzada por la CEOE al Gobierno para “revisar la exclusión del colectivo de instaladores de la relación de beneficiarios de las ayudas en el Real Decreto-Ley 5/2021 y aportar justificaciones de su necesaria inclusión como potencial beneficiario”.
Ángel Bonet, presidente de la Asociación madrileña de instaladores, explica que “debido a la larga duración de la pandemia, nuestro sector ha sufrido un deterioro patrimonial importante”, razones más que suficientes para “ser incluidos dentro de las ayudas relacionadas en el Real Decreto-ley 5/2021, de 12 de marzo, de medidas extraordinarias de apoyo a la solvencia empresarial en respuesta a la pandemia de la COVID-19”. Con ellas, este sector, castigado también por las consecuencias de las medidas adoptadas para combatir la pandemia, podría “obtener la financiación necesaria y así hacer frente a la disminución de ingresos”.
Actividad esencial
Estas medidas de apoyo ayudarían a recuperar y reactivar a las empresas, contrarrestando la recuperación de un colectivo que, recuerda Bonet, “fue considerado como actividad esencial durante la pandemia” y que resulta imprescindible como instrumento de apoyo en la actividad de otros sectores, construcción, hostelería o sanidad, entre otros.
Convencido de que los criterios establecidos para la asignación de las líneas de ayudas principales en base a los epígrafes CNAE resultan injustos, “pues la mayor parte de las empresas de los sectores que operan en nuestra economía están pasando dificultades”, el presidente de APIEM pone el foco en la necesidad de “reflotar a las empresas viables (sociedades y autónomos), sin atender a epígrafes”, aunque sí contemplando el nivel de pérdida de ingresos.
Desde APIEM hacen hincapié en que España tendría que ‘diversificar’ y este sería un buen sector para poder hacerlo bajo el mensaje de que “el sector está pidiendo a gritos una gran adaptación tecnológica para poder avanzar, situando a las empresas en el centro de esa estrategia”. Otra razón de peso que, para Bonet, justifica destinar esos recursos y ayudas que el sector necesita.
