Power ESS: sistema de almacenamiento energético con baterías de segunda vida
Power ESS es el nuevo sistema de almacenamiento de energía que presenta BeePlanet Factory a partir de baterías de segunda vida de ion-litio para vehículos eléctricos. Dirigido al sector comercial e industrial, primario y construcción, el sistema cuenta con una capacidad que va de 42 kWh hasta 1MWh y está preparado para integrarse en plantas fotovoltaicas y eólicas.
BeePlanet, un referente en el sector de las baterías de segunda vida, aúna en Power ESS una serie de características que lo convierten en un sistema singular. Así, los equipos son flexibles, modulares y escalables, partiendo de un rack de 42kWh. Cada uno de esos rack se puede ir expandiendo por módulos conectados en paralelo hasta 1MWh, permitiendo que, si en el futuro se necesita ampliar la capacidad del proyecto, se podrá realizar de forma sencilla.
Soluciones llave en mano
Estas soluciones llave en mano se instalan a la intemperie, permitiendo ofrecer grandes capacidades en energía y potencia. Además, los equipos están compuestos por unidades mínimas reemplazables que permiten aumentar el ciclo de vida de la instalación. Cuando se detecta, a través del mantenimiento remoto, que hay una unidad mínima (stack) que ha llegado a su límite de capacidad, se reemplaza y recicla. Eso permite la mejora evidente de la eficiencia en la utilización de materiales, ampliando su vida útil y reduciendo las emisiones de gases de efecto invernadero a lo largo de todo su ciclo de vida.
El departamento de ingeniería de BeePlanet ha desarrollado un producto muy versátil, que ofrece diferentes respuestas a necesidades presentes y futuras, que van desde el autoconsumo comercial e industrial, hasta el almacenamiento para infraestructura de recarga, habilitando la instalación de cargadores rápidos o ultrarrápidos en zonas con acceso limitado a red, incluso en exteriores ubicados junto a la estación de recarga. También es apto en el almacenamiento para microgrids y plantas renovables y en la industria, ya que consigue un precio fijo de electricidad, mejorando el ratio de autoconsumo por encima del 90%. Además, el back-up de energía asegura el proceso productivo ante problemas de red.
Otras aplicaciones son: sector primario, al mejorar el bombeo solar, solucionar los huecos de generación en pasos de nube y ahorrar en los procesos de producción del ámbito ganadero y agrario; constructoras y estudios de arquitectura, ya que habilita el autoconsumo sostenible compartido, genera comunidades energéticas locales y disminuye impactos y emisiones; plantas renovables; cooperativas energéticas o fabricantes de puntos de recarga, mejorando el acceso a red, agilizando la puesta en marcha y permitiendo la instalación de recarga rápida en cualquier ubicación.
