Mejorar la calidad del aire en los edificios con soluciones de Ziehl-Abegg

Mejorar la calidad del aire en los edificios con soluciones de Ziehl-Abegg

Si algo ha evidenciado la pandemia que arrastramos desde hace un par de años, es la necesidad de contar con una óptima calidad del aire en el interior de los edificios, donde pasamos el 90% de nuestro tiempo. No es éste un debate nuevo; desde hace tiempo, los expertos llevan preguntándose por qué al igual que cuidamos nuestra alimentación para preservar la salud, no hacemos lo mismo con la calidad del aire que respiramos: alrededor de 15 kg diarios. Pero sí ha sido ahora, tras ponerse de manifiesto la relación de la COVID-19 con la calidad de aire cuando han saltado todas las alarmas, dando el impulso necesario para la adopción de tecnologías innovadoras que permitan mejorar el aire interior, que puede estar hasta 50 veces más contaminado que el exterior, y que influye en la salud y en la productividad de las personas y trabajadores.

 

Y es que no solo en las viviendas y en los hogares la calidad del aire debe ser una prioridad. La preocupación por mantener espacios saludables, libres de virus y contaminantes, abarca una amplia tipología de edificios, como hospitales, oficinas, hoteles, restaurantes, escuelas, centros deportivos o museos, entre otros muchos.

 

Ya hace años que se acuñó el término de ‘síndrome del edificio enfermo’ para denominar a las sintomatologías y enfermedades provocadas por la contaminación del aire en ambientes cerrados (dolores de cabeza, congestión, resfriados, picor de ojos…) y cuyo origen está en el mal estado del edificio. Por otro lado, son muchos los contaminantes de diversa índole -ya sean virus como el que ha causado la COVID-19, como partículas o contaminantes gaseosos-, que pueden estar presentes en varias fuentes de aire: exterior, de impulsión, interior, de extracción o de expulsión. “Lo común a todos ellos es que, independientemente de dónde se encuentren, están intrínsecamente unidos a la temperatura y humedad del aire, por lo que la aeración, tratamiento del aire y renovación del mismo jugarán un papel fundamental en la mejora y mantenimiento de su calidad”, señala Alfredo Rodríguez, Business Development Manager de Ziehl-Abegg Ibérica. “Hay que tratar de evitar que el edificio caiga ‘enfermo’ debido a una mala calidad del aire”, añade el experto.

 

Tecnologías para la salud: filtros HEPA y uso de ventiladores ECblue

En este escenario, aumentar la calidad del aire en el interior de los espacios se convierte en un reto para los profesionales que operan los edificios. Y es aquí donde la ventilación forzada, más allá de la natural, se convierte en protagonista. Pero para una mayor efectividad, ésta tiene que ir acompañada de una purificación del aire eficiente, mediante filtros HEPA (High Efficiency Particle Arresting), y siempre y cuando los ventiladores utilizados garanticen un suministro de aire controlado de acuerdo a las necesidades puntuales del espacio, con un nivel sonoro y consumo energético reducidos.

 

 

 

Entre las tecnologías más innovadoras, la gama de purificadores City, desarrollada por Camfil en colaboración con el especialista en ventiladores Ziehl-Abegg, combina tecnologías punteras capaces de proporcionar a muchos de los denominados edificios ‘enfermos’ una solución a sus problemas.

 

Estos purificadores están equipados con filtros absolutos HEPA, de clase H14, que tienen una eficacia del 99.995 %, lo que significa que solo permite el paso del 0,005 % de las partículas de 0,1 micras. Considerando que las partículas del virus Sars-Cov-2 son de 0,1 micra, la gama City se convierte en un gran aliado en la lucha contra la pandemia. Además, incorporan ventiladores con tecnología  ECblue de Ziehl-Abegg, altamente eficiente, con los que el filtrado de aire se realiza con unos niveles sonoros y consumos energéticos muy bajos.

 

 

 

En cuanto al ventilador  plug-and-play ZApilot, de  Ziehl-Abegg, incorpora los últimos avances tecnológicos que son aprovechados en los purificadores de aire de Camfil. El uso de motores de tecnología ECblue (electrónicamente conmutados) con una regulación con señal 0-10 V proporciona un consumo energético muy contenido. El rodete de material compuesto de alto rendimiento y el módulo que integra deflectores de flujo para reducir turbulencias siguen un diseño biónico, resultando una solución extremadamente silenciosa que aumenta la eficiencia en un 10% en comparación con los estándares habituales del mercado.

 

La integración de todos estos componentes en un solo purificador, convierten a la gama City en una  solución a la cabeza en cuanto a tecnología, efectividad, eficiencia y nivel sonoro. La instalación de estos equipos en laboratorios, hospitales u oficinas conlleva ventajas y beneficios asociados para la salud de los usuarios: mejora del estado de ánimo y rendimiento, pulmones más limpios reduciendo asmas y alergias, mejora de la presión sanguínea, la digestión y el sistema inmune, entre otros beneficios.