4 grandes líneas estratégicas en el nuevo Plan de Fomento de las Comunidades Energéticas Locales

4 grandes líneas estratégicas en el nuevo Plan de Fomento de las Comunidades Energéticas Locales

El Gobierno Valenciano pretende que, para 2030, “todos los municipios del territorio valenciano dispongan de comunidades locales de energía». El anuncio lo realizó Rafa Climent, consejero de Economía Sostenible, Sectores Productivos Comercio y Trabajo durante la presentación del Plan de Fomento de las Comunidades Energéticas Locales (CEL), elaborado por el Ivace.

Climent, que estuvo acompañado por la directora general de Ivace, Julia Company, abundó en la necesidad de «abandonar un modelo en el que la ciudadanía tiene un papel de meros consumidores, a otro en el que son protagonistas, parte activa que se beneficia de la generación, la distribución, la gestión y el consumo de energía a nivel local».

Nuevo mapa de actores productores

En ese nuevo escenario, la sostenibilidad juega un papel determinante y convincente, por eso, además de apostar por un modelo sostenible, resulta básico que sea “justo y democrático», apuntó Climent quien identificó y destacó en esa nueva configuración “las cooperativas energéticas o las comunidades energéticas en las que se constituye un nuevo mapa de actores productores».

Las comunidades energéticas locales, en calidad de entidades jurídicas, formadas por una agrupación de socios que, voluntariamente y con participación cooperativa, establecen sus objetivos en la obtención de beneficios energéticos, sociales o medioambientales, están capacitadas para organizarse y producir, autoconsumir, gestionar y almacenar su propia energía. Por eso, a juicio del consejero resultan “esenciales para transformación del modelo energético”, ya que a los objetivos energéticos y económicos se suma “fomentar la participación ciudadana, utilizar las cadenas de suministro locales y crear empleo, manteniendo el valor de la generación de la energía dentro de la población local».

En esa hoja de ruta, el Gobierno Valenciano ha mantenido una actitud muy activa, abanderando desde el Ivace una línea específica de ayudas a las comunidades energéticas que ya ha permitido apoyar un total de siete proyectos de energías renovables en comunidades locales y ha liderado tres manifestaciones de Interés para desarrollar estas redes. Pero quizá la iniciativa más destacada es, según Climent, «el Plan de Fomento de las Comunidades Energéticas Locales que hoy ve la luz y que trazamos como objetivo del Consejo en el Seminario de Dénia- Jávea, celebrado en febrero de 2020″.

El nuevo Plan de Fomento de las Comunidades Energéticas, al que Ivace destinará 20 millones de euros, se postula “como la hoja de ruta de las comunidades energéticas en nuestro territorio y marca el camino a seguir en los próximos años, identificando los principales retos y oportunidades, al tiempo que establece las principales líneas de actuación», argumentó Climent.

Los fondos inicialmente previstos se complementarán con la captación de los procedentes del Mecanismo de Recuperación y resiliencia integrado en el Programa Next Generation EU, que tiene en la transición energética uno de los ejes principales para la reactivación de la economía.

Líneas estratégicas del Plan

Llegados a este punto, la directora general del Ivace, Julia Company, identificó cuatro grandes líneas estratégicas del Plan: fomentar el interés de la sociedad en general y su implicación en la transición energética y en particular en las comunidades energéticas locales; capacitar a los diferentes agentes que participan del modelo para facilitar el desarrollo de nuevas comunidades; facilitar el desarrollo técnico-administrativo y fomentar la cooperación, actuando como catalizador de sinergias.

En torno a estas líneas se articulan diferentes medidas que abarcan desde campañas de sensibilización y difusión, bonificaciones tributarias a través del IBI y otras tasas, o la creación de una plataforma donde quedan registradas todas las superficies públicas y privadas utilizables, así como la validación de un observatorio de barreras y trabajo normativo, el establecimiento de regímenes de ayuda específicos, con financiación y ayudas a la instalación de sistemas de gestión de la demanda y la puesta en marcha de un «sello de verificación» de CEL, entre otros.

Para Company, «el Plan es el resultado de un trabajo cooperativo y colaborativo y ha contado con un grupo de trabajo, en el que están representadas administraciones públicas, sector energético, consumidores y cooperativismo que nos ha permitido plasmar una visión compartida”. En este grupo en concreto participan, junto a las diferentes direcciones generales de la Generalitat, representantes de la Unión Española Fotovoltaica (UNEF), la Fundación Cambio Climático, la Federación de Cooperativas Eléctricas de la Comunidad Valenciana, el Instituto Tecnológico de la Energía (ITE), Sapiens Energía, Grupo Enercoop, el Instituto para la Diversificación y Ahorro Energético (IDAE), la Asociación Valenciana de Empresas de Energía (Avaesen), la Federación Valenciana de Municipios y Provincias (FVMP), AlternaCoop y la Unión de Consumidores de la Comunidad Valenciana.